Mudanzas temporales (2023)

Cada ciudad tiene un sonido particular, como cada relato un contexto especial en el que se desarrolla, unos encuentran un rumor interior, otros hallan casi como una frontera entre la sensibilidad que lo soporta todo y aquella en la que se deslizan los personajes oportunos, sagaces y nunca condescendientes. Los cuentos de este libro tienen una música interna que late dentro de cada lector. Cuando el concreto se encuentra con un parque se establece un límite y algo se dispersa, amortiguando conductas y tradiciones. En Mudanzas temporales el escritor Wari Gálvez Rivas nos ofrece una antología de personajes subidos como cariátides en columnas de concreto armado, todos ellos con miradas hacia otros horizontes. La realidad, por efecto de los modelos de conducta adoptados, se incorporan de diferente manera a la actividad diaria; mientras los medios de comunicación avasallan eficientemente las costumbres citadinas incorporadas a las nuevas generaciones, evidencian un panorama ambiguamente alentador. Wari Gálvez Rivas ha incluido en Mudanzas temporales diez textos, donde cada personaje ubicado en diferentes lugares, experimenta situaciones disímiles, incorporando a sus experiencias de vida, las vivencias del modus vivendi cambiante y cada uno de ellos, sometido al laissez faire, laissez passer. En sugestiva propuesta, Gálvez Rivas ubica a sus personajes e historias en Lima, con experiencias de hechos y personajes endémicos, como también en Huancayo, Arequipa a excepción del primer relato —El fin de una crónica—, en el cual narra la experiencia de un joven reportero, en la que debería ser su mejor entrevista, por tratarse de un personaje que estuvo cerca a una insurrección extremista en la sierra peruana, ahora refugiado en Italia. —Los negocios y el amor no se mezclan—, ambientado estupendamente en Barcelona. El último relato —Dos corazones en París— completa este volumen también ambientado en esta ciudad: dos mujeres van dando los pasos necesarios, intentando lograr sus muy particulares metas en esta ciudad, hasta que a una de ellas se le presenta la realidad descarnada, pulverizando sin contemplaciones su estadía.